El proyecto Alicante era de suma importancia, con la participación de toda la cúpula directiva. Sr. Navarro era un tirano en el trabajo.

Los ejecutivos respondieron de inmediato, “Sr. Navarro, la Srta. Camelia dice que su vuelo se retrasó y realmente lo siente.”

El hombre respondió con frialdad, “Que llegue lo más rápido posible!”

En ese momento, en Valverde, en la mansión de la familia Zaldivar.

Elvira y su hija estaban incómodas de pie frente al sofá, mientras que la mujer sentada sacó un diamante de 28 quilates y lo observó con una sonrisa pícara antes de entregárselo a Celina.

“¿Qué significa esto, prima?”

Camelia se levantó, sus ojos almendrados emitían un frío en la oscuridad de la noche. Sonrió y dijo, “Mañana es el cumpleaños número 80 de Jimena, y se dice que Salvador compró especialmente este pedazo en la Joyas Elegantes para contentar a su esposa. Toma este ‘pedazo y reemplázalo. ¿No estás furiosa porque Serena te quitó el puesto de gerente general?”

Celina pensó detenidamente y sus ojos se iluminaron, comprendiendo de qué se trataba aquel ‘diamante‘.

Miró a Camelia, sorprendida.

No esperaba que su prima conociera tan bien los entresijos de Joyas Elegantes, hasta el punto de saber que ella había introducido en secreto piedras de baja calidad en el mercado.

Camelia había aparecido ante ellas solo dos días antes, pero Celina sintió que su prima se había estado preparando durante mucho tiempo y tenía un conocimiento detallado de todo lo relacionado con Serena.

Esta capacidad sorprendente y aterradora hizo que Celina sintiera miedo en lo más profundo de su ser.

Estaba casi segura de que su prima tenía una riña personal contra Serena.

Celina, temblorosa de emoción, se apresuró a hacer lo que le habian pedido.

¡Habría un gran espectáculo al día siguiente!

Al día siguiente por la tarde, Serena fue a Joyas Elegantes para investigar el material de los diamantes.

Envío a alguien a llamar a Celina, la principal sospechosa, pero Celina no aparecía por ningún lado.

Serena solicitó al gerente encargado del material que la acompañara al almacén de la compañía, preparándose para cortar y examinar un lote de diamantes.

La puerta del almacén se abrió y ella dio unos pasos hacia adentro. Antes de que pudiera prender la luz, la puerta se cerró de inmediato.

Serena frunció el ceño, sus brillantes ojos se llenaron de sorpresa al darse cuenta de que algo no estaba bien, pero no pudo abrir la puerta.

Después de unos treinta minutos, la puerta se abrió de repente desde el exterior.

Justo cuando Serena levantaba la vista, un grupo de policías irrumpió en el lugar. La vieron de pie frente al armario de diamantes y de inmediato la esposaron, “¿Eres Serena? ¡Llévensela!”

“¿Qué sucede, oficial?“, preguntó Serena, confundida y con un mal presentimiento.

El policía la miró fríamente y dijo, “Durante la gran celebración del cumpleaños número 80 de Jimena, se descubrió que el diamante de 28 quilates ‘Amor Verdadero de la Dama‘ comprado por Salvador en su tienda

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era una falsificación. Ahora, se ha descubierto que más de la mitad de las joyas vendidas de Joyas Elegantes son unas falsificaciones. Como diseñadora y gerente general de Joyas Elegantes que compró diamantes falsificados, has cometido un grave delito contra el comercio. ¡Ven con nosotros a la estación de policía!”

“¿Qué?” Serena estaba conmocionada.

Alexander, que habia llegado al ofr la noticia, cambió su expresión y le dijo a Serena con el ceño fruncido, “El gran diamante de la Sra. Núñez fue comprado en nuestras Joyas Elegantes. Se descubrió que era falso durante el almuerzo, y el asunto ha conmocionado a Valverde. La Sra. Núñez tuvo un ataque al corazón de la indignación y la familia Núñez está furiosa. Hace dos horas, inspectores del Departamento de Comercio encontraron una gran cantidad de mercancía falsa en nuestra tienda, y ya está en las noticias, Serenita…”

Eso fue un material de mala calidad que compró Celina.” Serena parpadeó rápidamente, intuyendo que era una trampa de Celina, se defendió de inmediato, “Señor, hace dos meses que dejé Joyas Elegantes, la ‘Colección de Damas‘ fue mi diseño, pero no tuve nada que ver con la producción, Celina estaba a cargo de los materiales, jespero que lo investiguen adecuadamente!”

El oficial parecía haber anticipado su defensa, “Serena, no tienes que seguir inventando excusas, Celina ya proporcionó pruebas de tu conspiración con el proveedor de piedras preciosas de baja calidad para recibir sobornos de millones, y este gerente de tu empresa también dice que ingresaste al almacén para destruir evidencia. ¡Ven con nosotros en este momento!”

Serena se giró para mirar al gerente de materiales.

El gerente tenía una expresión evasiva.

Serena frunció el ceño y se puso pálida. El asunto involucraba a los cuatro grandes clanes de la familia Núñez, definitivamente no era algo menor.

Algo nerviosa, sacó su celular y llamó a N, él había dicho que en caso de cualquier problema, la primera persona en quien debería pensar era él. ¡Ahora era el momento de ver si podia ayudarla!

En la ciudad de Alicante.

Camelia entró a la oficina de la empresa con un traje de negocios, “¿Dónde está el Sr. Navarro?”

No había nadie en la oficina.

El asistente dijo con gravedad, “El proyecto Bahía de las Estrellas sufrió daños a causa de un huracán, el Sr. Navarro acaba de ir para allá.”

En ese momento, el teléfono personal de Valentino en el escritorio comenzó a sonar, Camelia entrecerró los ojos, era una llamada de Serena.

El asistente tomó el teléfono, listo para llevárselo al Sr. Navarro.

Pero Camelia dijo, “Dámelo, se lo llevaré de paso al Sr. Navarro.”

Pero es el teléfono personal del Sr. Navarro, señorita Camelia…”

“¿Acaso no sabes quién soy yo? Voy hacia la obra, ¿qué es lo que no te parece seguro?” Dijo Camelia con una sonrisa suave.

El asistente se sonrojó, ella era la subdirectora de Joyas Imperiales, una empresa que no solo vendia joyas, sino que tenía innumerables filiales. Camelia tenía un estatus elevado, era una dama de la alta sociedad y Ilamaba al Sr. Navarro por su nombre de pila, Vali.

Finalmente, el asistente le entregó el teléfono.

Camelia lo tomó y salió, había un trayecto de diez minutos desde la oficina hasta la obra, y ella deliberadamente ralentizó su paso.

El teléfono de emergencia de Serena sonó dos veces, y Camelia observó cómo sonaba sin colgar, hasta que

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Capitulo 74

finalmente se cortó automáticamente.

Los labios de Camelia se curvaron en una profunda sonrisa.

Serena frunció el ceño, sin entender por qué N no respondía a su llamada. Estaba muy ansiosa, solo podía pensar que tal vez estaba ocupado.

Inmediatamente llamó a Rocío, pero antes de que pudiera hablar, un oficial le arrancó el teléfono de las

manos.

La llevaron a la patrulla, y Alexander corrió tras ella, Serena le dijo en voz baja, “La familia Núñez está furiosa, ¿puedes hablar con Rocío a ver si puede interceder por mí? Además, encuéntrala rápidamente, tengo algo en su poder que necesita llevar a la estación de policía para poder limpiar mi nombre.”

Alexander frunció el ceño y asintió con fuerza.

No tenía ni idea de que Celina había comprado piedras preciosas falsificadas, y mucho menos que había llevado al mercado diamantes falsos y que Salvador había comprado uno grande como un huevo de paloma. ¡Maldición! Al darse cuenta, Alexander entendió que Celina había preparado pruebas contra Serena… Inmediatamente llamó a Celina.

Pero ella deliberadamente ignoró la llamada.

En la estación de policía.

Serena fue llevada a la sala de interrogatorios. La luz blanca y deslumbrante del techo caía sobre su rostro. pálido.

Ella estaba aturdida, tratando de ordenar los eventos rápidamente en su cabeza. No cabía duda de que Celina la estaba usando como chivo expiatorio.

Con un golpe seco, un interrogador dejó caer un montón de documentos frente a ella, diciendo con voz fria y seria:

“Tu cómplice en el fraude, el proveedor de diamantes falsos, el Sr. Tomás, ya confesó. Dijo que no solo te proporcionó piedras de baja calidad a Joyas Elegantes y que te embolsaste más de dos millones, sino que también le recomendaste que suministrara diamantes de baja calidad a otras joyerías, creando una competencia desleal en el mercado y sacando un beneficio de más de seis millones. Siempre has colaborado con él, siete para ti y tres para él, ¿verdad?”

Capítulo 75

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