La Alfa Raven de Esclava a Reina by Luna Nova
Chapter 13

013

Raven

– Es…no importa, solo no te involucres en nada…es mejor hacer como que no sabes nada y si alguien te propone algo, que vayas a

ningún sitio de noche o sospechoso

Di que no, ¡no vayas a aceptar! – concluyó con mucha seriedad.

Y con la misma salió de la habitación, dejándome completamente

confundida.

Tantas emociones y enredos me tenían la cabeza, echa un lío.

Lo que era obvio, es que en esta manada estaba sucediendo cosas muy raras, secretas y peligrosas.

¿El Alfa sabría sobre los manejos subterráneos en esta área

discriminada y olvidada?

Como yo no era nadie, ni podía arreglar el mundo, me cambié por una

camiseta cómoda y unos pantaloncillos cortos y me acosté a dormir

en mi camastro.

Pasaron unos días, en relativa tranquilidad, pero no volví a ver

Una mañana, no pude aguantar más, si seguía recluida en el ár las esclavas, entonces mi plan de acercarme a él, se iba a la mi

Además, ni siquiera pude practicar más, porque pusieron un absur toque de queda, que no dejaba vagar de madrugada por el bosqu

Algo me decía que eso era solo para fastidiarme. No tenía pruebas pero tampoco dudas.

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Había aprovechado que me pidieron llevar las ropas limpias al área de clasificación y vagué un poco más allá, internándome en la zonal más central de la manada.

“Raven, siento el olor de muchos machos cerca” Sena me advirtió

“¿Sientes al Alfa?”

“Mmm, no estoy segura, hay demasiadas feromonas en el aire”

“Entonces acerquémonos a ver”

Como siempre, doña temeraria, me acerqué a escondidas, protegida por unos arbustos, a lo que parecía ser un campo de entrenamiento.

Dentro, robustos y fuertes guerreros, sudaban en camisetas negras de combate, mientras se enfrentaban unos con otros.

Estaban entrenando y no pude evitar quedarme fascinada mirando tal cespectáculo.

Puro músculo e intimidación, fuerza bruta y choque titanes.

Más que mirar por la atracción hacia los hombres, lo hacía por la admiración y la envidia.

Acquién no le gustaría tener esa fuerza, esa agilidad.

SB suppliese defenderme de esa manera, nadie nunca me habrí apocreeddomi escupido en la cara.

-¿Te parroco excitante la vista?- un susurro caliente y peligros llegó a mi boddo.

Me estremectal sentir una intimidante presencia pegada a mi

espalda. Estato completamente jodida.

-A…Alfaa

¿También tienes self fetiche de mirar a escondidas a los machos d

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ใน 1 แบบนะ

By L.

J

Toda su aura fría rodeándome y haciéndome estremecer de miedo.

– No, no, solo quería aprender… sus movimientos de lucha- mi voz temblaba mientras hice por girarme a enfrentarlo, solo que no me dejó.

–

– Entonces dime, ¿cuál te parece el mejor?- su ruda mano tomó mil barbilla con fuerza y me hizo mirar, sin poderlo evitar, hacia el campo de lucha.

Detrás, todo su enorme cuerpo pegado a mi espalda.

Podía sentir sus duros músculos presionándome y más abajo, un bulto que rozaba mi espalda baja.

El Alfa medía como dos metros y yo era una pequeñaja de a penas 1.63 cm.

– To….todos se ven bien…digo…pelean bien – “mierd4, estamos fritas” Sena susurró en mi mente.

– ¿Se ven bien? Dime, cuál te parece mejor- me habló entre dientes y el hecho de estar tan cerca, con todas sus feromonas invernales. rodeándome posesivamente, me tenían el cerebro hecho una papilla.

– No…no sé…

– ¡Dime!, alguno te debe gustar más que otro, ¿no? Aquel pe el del pelo castaño, el más fuerte, el más alto- apretaba los en mi mandíbula de manera dolorosa, obligándome a responde

“Ni se te ocurra señalar a ninguno” Sena me advirtió, pero jel lob Alfa la tenía también acorralada!

El del pelo oscuro, aquel, me parece el mejor guerrero- al final tu que señalar a una víctima.

Así que te gusta mi Beta, tus estándares son bien altos podría

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Jས་ས་ q-༤ iuས Vuo CF Juo puiuungs

–

– No me gusta él, solo admiro como…como pelea…solo quieroo

aprender…

Entonces, si él se ofrece a enseñarte, ¿aceptarías?

– Quizás hasta te pide a cambio que le calientes su cama, ¿también te gustaría? – escupió y ahora sí que me estaba cabreando un pocca pesar del miedo instintivo que le tenía.

– No le caliento la cama a nadie Alfa, no soy una cualquiera mee quité de un tirón su mano de mi barbilla y giré para enfrentar esoss ojos azules que desprendían hielo.

– He dicho la verdad, solo quería aprender a defenderme- intentéé aguantar como pude su mirada aguda, a pesar de los temblores de

mi cuerpo.

Ser una Omega apestaba y delante de este Alfa superior, todo mi

instinto me llevaba a la sumisión.

– No sé si eres muy valiente o solo imprudente, cada vez que te veo estás haciendo algo fuera de las reglas.

Comenzó a dar pasos amenazantes y yo retrocedí, queriendo escapar, hasta que el tronco de un árbol me detuvo.

No me gustan las hembras desobedientes y menos las que va ahí, acosando y babeando por mis guerreros, si tanto buscas un macho para aparearte …

– No estoy buscando nada, ¡¿qué parte de “estaba aprendiendo” entiende?! – respondí en un ataque de rabia y estupidez y luego m quedé congelada.

Definitivamente, no quería mi vida y la estaba tirando aquí mismo.

El Alfa me asesinaría sin piedad por sublevación.

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No aguanté más y bajé la cabeza mirando mis pies.

¿Cómo lo haría? ¿Me giraría el cuello de una y ya, o habría tortura primero?

-Tan respondona y tan débil- senti su aliento rozando mi frente como las alas de una mariposa.

La punta de mi nariz tocaba su duro pecho y a través de la tela oscura de su sudadera, se filtraba el delicioso olor a nieve, que aplacaba todo el calor en mi interior

Con un dedo debajo de mi mandíbula me hizo subir la cabeza y antes siquiera de hablar, una suave lengua comenzó a recorrer las marcas rojas que habían dejado sus dedos antes, cuando me agarró con fuerza de la barbilla.

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