¡Mamá más Suave! Papá Llora Otra vez novela completa
novela completa Capítulo 33

Capítulo 33

Todos voltearon la mirada yahi estaba Luciano, vestido de traje, parado sin saber desde cuando, su punto rostro lleno de una sombra amenazante.

“Tucho “a voz de Verónica conaba débil mientras lamaba Luciano

Este avanzo con pasos firmes, observando a Rosalba con una mirada frin.

Esa mrada estaba llena de desden y repulsión

Rosalba cursus labios, dejando escapar una sonrisa spicástica

Lucho, me duele mucho

Alescuchar esto, Luciano se inclino para ayudar a Veronica a levantarse

Cómo te encuentras? ¿Todo va bien?”

Veronica se mordió el labio, y una lágrima cayó mientras negaba con la cabeza, mostrándose doliday reprimida.

Lucano mir hacia Adela con fraldad, quien se levantaba por si misma, y preguntó con una voz gelida, “¿Qué ha pasado aquí?”

Adela de inmediato apuntó hacia Rosalba y Marisa, acuándolas en voz alta, Ellas empezaron a agredir primero.“

“dicta, hay cámaras Marisa rodó los ojos exasperadamente

Con las cámaras, era obvio quién había empezado primero.

Adela mardió su labio continuando. Pero las empezaron a molestar a Veronica primero, Sr. Beltrán Rosalba l llamó a Verónica una rompehogares.

“No gastoneras, fui yo quien lo dio La intertumpió Marisa

La példa mirada y llena de ira de Luciano se posó sobre Manisa

Al ver esto. Rosalba protegio a Mansa, ponendola detras de si

Luciano estaba realmente furioso, más de lo que Marisa podria soportar.

No queria que ella se metera en problemas por defenderla.

Despues de ser interrumpida dos veces por Marisa, la voz de Adela se volvió aún más aguda, proclamando en voz alta, “Sr. Beltrán, ellas dijeron que Veronica era una rompehogares, incluso dijeron que ella merecía haber perdido a su bebé. No pude soportarlo y por esa razón quise confrontarlas, pero… no pude contra ellas… St Beltrán, usted debe vengar a Verdrica

Veronica.acurrucada en los brazos de Luciano, sollozaba incesantemente, dando pena verla

“Lucho, no culpes a la Sita Saldaña, yo también tuve la culpa en lo que sucedió aquel año, puedo entender que esté enojada.”

Veronica halo profundamente, continuando con su voz quebrada, “Pero Srta. Soldaria, ese niño era el dolor de mi vida, túto mataste y ahora, lo último que deberías hacer es usarlo para lastimame”

Los ojos de Luciano se oscurecieron aún más, clavando su mirada en Rosalba con funia, “Rosalba!”

Marisa estaba a punto de intervent nuevamente, pero Rosalba la detuvo

Ella estaba cansada de explicar lo del niño que Verónica no llegó a perder hace cinco años, ya no quería dar más explicaciones.

Pero necesitaba dejar las cosas claras sobre qué se habla dicho y qué no

“Hay cámaras en este lugar, quién esté en lo correcto y quién no, las camaras lo mostrarán

Veronica al la mirada hacia las cámaras, con los ojos centelleando, Lucho…ys no le guardo remordimiento a la Sra. Saldaña, mi mano está herida y me duele mucho.

Necesito que me lleves al hospital, por favor.”

Veronica levantó su mano, mostrando un profundo corte que no se sabia cómo había obtenido, la sangre procedia de ella, creando una vista alarmante.

Luciano echo un vistazo a la mano de Verónica, sumirada fria cayó nuevamente sobre Rosalba

“Disculpate.” Su voz era como un hielo.

La mirada de Rosalba se endurecio, esbozó una sonrisa fria “¿Por qué deberia disculparme si no es culpa mia?

“La empujaste, la lastimaste, diste cosas que no deblas, no deberias disculparte?” La mirada de Luciano estaba cargada de in

“Ja’Rosalba soltó una risa fria

Siempre era lo mismo

Cada vez que se trataba de Verónica, el crela en ella sin siquiera investigar

No crea una sola palabra de lo que ella detia

Rosalba bajo la mirada, sonriendo con auto desprecio, y tomando a Marisa por el brazo, dijo, “Vámonos

“Deténganla.” La vor de Luciano sonaba gélida.

Clemente, acompañado por dos guardaespaldas, interceptó inmediatamente a Rosalba y Marisa.

“¿Crees que puedes escapar como lo hiciste hace cinco años? Disculpate, de lo contrario, cualquier daño que sufra ella, será culpa tuya”

La voz de Luciano era tan fria que no tenia ni un épice de calidez

Era como si una cuchilla afdada se clavara paulatinamente en el corazón de Rosabba

Ella pensé que, después de cinco años, su corazón y estaria muerto, pero cuando enfrentaba el dolor, todavia se sentia fada por el sufrimento.