Capítulo 2366

Siempre supo que las personas con sentimiento de culpa eran las que alzaban más la voz

Esos secuestradores estaban todos desesperados, y aunque ahora estaba en una posición desventajosa, kabla que ese grupo tenia sus fallen.

Especialmente el jefe, que parecía añorar su juventud, esa era la oportunidad para Leonardo de encontrar un resquicio Ni hablar de que todos le temian al jefe, probablemente era él quien planificaba y dirigia cada uno de sus movimientos, y lo más seguro es que tuviera sangre en sus manos.

Claro, todo esto eran suposiciones de Leonardo, y si podia evitar un enfrentamiento directo con ellos, mejor

Pero si eran desesperados, eso significaba que incluso después de obtener el dinero, no necesariamente cumplirian su promesa de liberarlos.

El ceño de Leonardo se frunció levemente al recibir una bofetada, pero eso era lo de menos.

Lo que le preocupaba era lo que vendría después, especialmente porque Magdalena estaba con él.

Desde el momento en que los secuestraron juntos, nunca consideró la idea de escapar solo.

Solo esperaba que su abuelo no hiciera caso a las demandas de los secuestradores y que no intentara resolverlo sin la ayuda de la policía.

Fue solo cuando el jefe salió a revisar su mochila que Leonardo se enderezó, apoyándose en su espalda.

“Magdalena, ¿te encuentras bien?”

Al oir la voz de Leonardo, Magdalena no pudo contener las lágrimas.

Cuando el jefe de los secuestradores estaba presente, ella habia aguantado, temiendo que cualquier ruido pudiera llevarla a ser arrastrada de nuevo.

“Lo siento, vinieron por mi y no pensé que te involucraria.”

Leonardo se sentía genuinamente apenado.

“Pero no te preocupes, mientras yo esté aqui, te protegere.”

Magdalena inhaló profundamente, “Ahora me encuentro mejor, solo tengo las manos y pies enturecidos, y tirada en el suelo.

¿Sabes quiénes son estas personas? No tenemos rencillas con ellos, ¿por qué nos secuestraron? ¿Todo esto es solo por dinero?”

Escuchando que la voz de Magdalena estaba relativamente calmada y que no le reprochaba el haberla involucrado. Leonardo sintió que ella estaba enojada además de asustada.

Ella era considerada por naturaleza y no culpaba a Leonardo, algo por lo que el estaba agradecido, porque nadie estaria feliz de ser arrastrado a una situación como esa

Estas personas solo quieren dinero, y espero que después de obtenerlo nos dejen ir.”

Aloir el tono poco esperanzador de Leonardo, Magdalena se sintió aún más desesperada.

“Tú mismo lo has dicho, esperamos que estas personas crueles nos liberen después de conseguir el dinero

Ahora que estamos atados de manos y pies, no tenemos escapatoria. Quiero volveremos a casa!

Si hubiera sabido, no me hubiera peleado con mi hermana anoche”

Magdalena volvió a sollozar en el suelo, dejando a Leonardo sintiéndose impotente. Queria decirle que no tuviera miedo, que no se preocupara, pero también sabia que en una situación asi era dificil mantener la calma.

Hablar más era inútil, sus propias manos y pies estaban atados, no podía hacer nada

Quizás si Magdalena lograba liberarse seria mejor. Por lo menos, los secuestradores no estaban alli, asi que si quena

llorar, que llorara.

Los secuestradores revisaban la mochila de Leonardo de manera brusca, y su carnet de estudiante junto con otras tarjetas cayeron al suelo.

“Jefe, mira qué guapo es este chico, hasta en la foto de la identificación sale bien, parece una estrella de cine.”

El flaco que habia oferidido al jefe antes, sonrió al presentarle las tarjetas.

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